Es en la cocina donde mejor se puede arriesgar; si no aciertas a la primera, insistes hasta que des con tu receta. Algo así me pasó con esta tosta.

Un día compré una barra de pan de nueces y pasas y decidí darle uso. Comencé superponiendo ingredientes hasta que dí con esta tosta. Empiezas con el pan, pones manzana, ¿por qué no añadir algo diferente? Aquí os traigo otra de mis mezclas favoritas de dulce y salado.

Pero antes, tengo algo pendiente hoy; otro cumpleaños...muchas felicidades Isa. Que pases un buen día en compañía de tus 3 niños. Si te queda tiempo, aquí te dejo la receta de hoy, fácil y rápida.

Allá va. Para que no os compliquéis en la cocina.

Ingredientes.

1 pan de nueces y pasas

3 manzanas

1/2 vasito de agua

Azúcar

Ventresca de atún en aceite

1 bote de remolacha en juliana

Vinagre de frambuesa

Prepara la compota con las manzanas, el agua y azúcar al gusto. Poner a cocer a fuego bajo hasta que la manzana esté blanda. Cuando esté cocida bátela hasta que obtengas una crema fina. Déjala enfriar.

Corta en pan en rebanadas de unos 2 cm de groso. Tuéstalas un poco en el horno o en la tostadora.

Echa unas gotas de vinagre. Unta el pan con una cucharada de compota de manzana. Coloca encima un poco de atún y decora con unas tiras de remolacha. Termina la tosta añadiendo otro par de gotas de vinagre de frambuesa.

Servir frío como entrante de un plato principal.